El antiguo paso elevado del tren por Capiscol, que en el futuro quedará reservado al transporte público, permitirá circular a los vehículos privados desde la próxima primavera
El lugar que ocupa la excavadora acogerá un nuevo paso de calzada doble sobre el río Arlanzón.
Para qué esperar unos meses más si existen posibilidades técnicas de adelantar una de las mejores noticias derivadas de la construcción del bulevar del ferrocarril. La conexión entre los barrios de Gamonal-Capiscol con el parque de Fuentes Blancas y toda la zona sur a través de la nueva espina dorsal de la ciudad llegará la próxima primavera y no a finales de 2011 como estaba inicialmente previsto.
Y no se trata de un recorte en el plazo de ejecución, algo que sería verdaderamente sorprendente tratándose de una obra pública, sino de la utilización provisional de un puente que en el futuro quedará reservado al transporte público. El antiguo paso elevado del tren sobre el río, justo al final de la Avenida del Arlanzón, está destinado a albergar autobuses y (quién sabe si algún día) tranvías, aunque en solo unos meses y de forma temporal soportará el paso de vehículos privados según los planes que maneja el Consorcio del Desvío.
El concejal de Fomento, Javier Lacalle, explica que el puente del tren, con un solo carril por sentido, dará servicio en algún momento de la primavera de 2011 «coincidiendo con la llegada del buen tiempo». A finales del próximo año se estrenará un doble puente con cuatro carriles que se construirá en paralelo a él, pero hasta que llegue su ‘hermano mayor’ prestará un servicio importante.
Gracias a su puesta en servicio los vecinos de la zona norte de la ciudad, la más poblada, ya no tendrán que bajar hasta la plaza del Rey y ascender de nuevo por la carretera de la Quinta cuando quieran ir en coche a Fuentes Blancas, la Cartuja o Cardeñajimeno. Desde ese momento podrán cruzar cómodamente el Arlanzón muy cerca del polígono de Pentasa hasta desembocar en la rotonda que se está construyendo junto al vivero municipal.
Con gran expectación
Y mientras tanto seguirá la ejecución del nuevo puente, que estos días despierta la curiosidad de los cientos de personas que cruzan la cercana pasarela peatonal camino a Fuentes Blancas. Según informan fuentes del Consorcio, en su lado sur todavía hay que trasladar una torreta eléctrica cuyos trámites ya están en marcha con Iberdrola. Al norte, tras cerrar el acuerdo con el propietario de una finca cercana, pronto se podrá entrar a actuar en los terrenos privados necesarios.
Y cuando todo esté listo, la circulación habrá provocado una transformación notable en todo el entorno siempre bajo las premisas estéticas de los arquitectos suizos Herzog&De Meuron que han proyectados el conjunto del bulevar.
La nueva avenida traerá consigo, a juicio de Lacalle, «el mayor cambio en la movilidad de la ciudad en las últimas décadas, junto con la puesta en servicio de la ronda interior norte» que discurre desde Villímar hasta Villalonquéjar y que entró en servicio durante el pasado mandato municipal.
Los beneficios evidentes de sustituir un trazado ferroviario por una calle pública conllevan, sin embargo, algunas molestias para los vecinos. Y quizás la más evidente sea la supresión de plazas de aparcamiento en los espacios aledaños a las antiguas vías. El concejal de Fomento admite que existe una reducción en el número de estacionamientos pero subraya que es una consecuencia directa «del diseño de Herzog&De Meuron, que plantean grandes espacios peatonales y por tanto condicionan el resto».
El planteamiento de los suizos prioriza el transporte público y el carril bici sobre los vehículos privados. Incluso en los tramos más estrechos habrá espacio para bicicletas, autobuses y peatones, pero no así para el aparcamiento a los lados. Para eso se han pensado los párkings subterráneos, como el que está ya en fase de venta en las huertas de La Concepción, de cuya demanda real dependerá la ejecución final o su renuncia.diario de burgos
El lugar que ocupa la excavadora acogerá un nuevo paso de calzada doble sobre el río Arlanzón.
Para qué esperar unos meses más si existen posibilidades técnicas de adelantar una de las mejores noticias derivadas de la construcción del bulevar del ferrocarril. La conexión entre los barrios de Gamonal-Capiscol con el parque de Fuentes Blancas y toda la zona sur a través de la nueva espina dorsal de la ciudad llegará la próxima primavera y no a finales de 2011 como estaba inicialmente previsto.
Y no se trata de un recorte en el plazo de ejecución, algo que sería verdaderamente sorprendente tratándose de una obra pública, sino de la utilización provisional de un puente que en el futuro quedará reservado al transporte público. El antiguo paso elevado del tren sobre el río, justo al final de la Avenida del Arlanzón, está destinado a albergar autobuses y (quién sabe si algún día) tranvías, aunque en solo unos meses y de forma temporal soportará el paso de vehículos privados según los planes que maneja el Consorcio del Desvío.
El concejal de Fomento, Javier Lacalle, explica que el puente del tren, con un solo carril por sentido, dará servicio en algún momento de la primavera de 2011 «coincidiendo con la llegada del buen tiempo». A finales del próximo año se estrenará un doble puente con cuatro carriles que se construirá en paralelo a él, pero hasta que llegue su ‘hermano mayor’ prestará un servicio importante.
Gracias a su puesta en servicio los vecinos de la zona norte de la ciudad, la más poblada, ya no tendrán que bajar hasta la plaza del Rey y ascender de nuevo por la carretera de la Quinta cuando quieran ir en coche a Fuentes Blancas, la Cartuja o Cardeñajimeno. Desde ese momento podrán cruzar cómodamente el Arlanzón muy cerca del polígono de Pentasa hasta desembocar en la rotonda que se está construyendo junto al vivero municipal.
Con gran expectación
Y mientras tanto seguirá la ejecución del nuevo puente, que estos días despierta la curiosidad de los cientos de personas que cruzan la cercana pasarela peatonal camino a Fuentes Blancas. Según informan fuentes del Consorcio, en su lado sur todavía hay que trasladar una torreta eléctrica cuyos trámites ya están en marcha con Iberdrola. Al norte, tras cerrar el acuerdo con el propietario de una finca cercana, pronto se podrá entrar a actuar en los terrenos privados necesarios.
Y cuando todo esté listo, la circulación habrá provocado una transformación notable en todo el entorno siempre bajo las premisas estéticas de los arquitectos suizos Herzog&De Meuron que han proyectados el conjunto del bulevar.
La nueva avenida traerá consigo, a juicio de Lacalle, «el mayor cambio en la movilidad de la ciudad en las últimas décadas, junto con la puesta en servicio de la ronda interior norte» que discurre desde Villímar hasta Villalonquéjar y que entró en servicio durante el pasado mandato municipal.
Los beneficios evidentes de sustituir un trazado ferroviario por una calle pública conllevan, sin embargo, algunas molestias para los vecinos. Y quizás la más evidente sea la supresión de plazas de aparcamiento en los espacios aledaños a las antiguas vías. El concejal de Fomento admite que existe una reducción en el número de estacionamientos pero subraya que es una consecuencia directa «del diseño de Herzog&De Meuron, que plantean grandes espacios peatonales y por tanto condicionan el resto».
El planteamiento de los suizos prioriza el transporte público y el carril bici sobre los vehículos privados. Incluso en los tramos más estrechos habrá espacio para bicicletas, autobuses y peatones, pero no así para el aparcamiento a los lados. Para eso se han pensado los párkings subterráneos, como el que está ya en fase de venta en las huertas de La Concepción, de cuya demanda real dependerá la ejecución final o su renuncia.diario de burgos
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