Tras la polémica con el nuevo plano de autobuses, trasladamos aquí la respuesta sobre las líneas de autobús.
La remodelación de los autobuses nace con un fuerte rechazo social. El PSOE ha anunciado que dará batalla y determinadas asociaciones de vecinos, como en la zona sur, denuncian que algunas zonas quedarán a 15 minutos de la parada más cercana.
No hay ningún lugar en el que se haya cambiado el transporte público a la modernidad que aquí buscamos y que no haya tenido críticas de inicio. El ejemplo más reciente es el de Vitoria. Estamos acostumbrados a que el autobús pare en nuestra puerta, pero o vamos a un sistema eficiente o el transporte público dejará de tener sentido en el medio plazo. Vamos a una filosofía, entre comillas, del metro. Hay que desplazarse un poco más hasta llegar a la línea, pero a partir de ahí la frecuencia es tan importante que te garantizas más rapidez. Y eso es la eficiencia en el transporte público, cuidando de forma especial lugares tan sensibles como el hospital, la estación de trenes o algunos barrios periféricos que ahora no tienen servicio los fines de semana y que ahora tendrán. Todas las líneas mejoran en frecuencia, vamos a pasar de 50 minutos a 25-26 y en algunos casos hasta 3-4 minutos.
¿Aún está sujeto a modificaciones si hay peticiones razonables?
Nada es eterno ni definitivo, pero ese documento es uno de los más trabajados de los últimos años, ha habido decenas y decenas de reuniones. Estamos abiertos a hablar para ajustar detalles, encantados. Y queremos que la nueva red esté operativa durante el verano. Seguro que se valora más cuando esté funcionando.
¿Se ha hecho para ahorrar?
En absoluto, no se ahorra nada. Serán los mismos conductores y los mismos vehículos. No se recorta ni un solo euro. Se cambia la forma de actuación a una tendencia más moderna
Comentarios