Burgos ha dado la bienvenida otro 5 de enero más a los Reyes Magos, que antes de visitar los hogares de los burgaleses han recorrido las calles de la ciudad saludando y sonriendo a los más pequeños, ilusionados por la llegada de Sus Majestades en la noche más especial del año.
Ya sin restricciones, ni mascarillas, pero ataviados con bufandas y guantes para combatir el fresco, miles de ciudadanos han salido de casa para contemplar el paso de la larga y colorida comitiva, que ha partido pasadas las seis y media de la tarde de la avenida de los Derechos Humanos, en Gamonal, rumbo al centro de la capital.
Cerca de un millar de personas, entre voluntarios y miembros de las diferentes compañías y colectivos, han desfilado por la calle Vitoria en una cabalgata llena de luz y color, con 13 carrozas, entre ellas las de los tres Reyes Magos y otras cuatro que representan una estrella, una góndola veneciana, otra egipcia y la del dragón Samarkán, un bicho gigante que custodia los miles de regalos que Melchor, Gaspar y Baltasar entregarán durante toda la noche.Las peñas Real y Antigua, Jóvenes de Gamonal y Colón también cuentan con sus propias carrozas y otras tres portan los 6.000 kilos de caramelos que se vuelven a repartir este año, ya sin restricciones. Hay otras tres, de menor tamaño, que desfilan con el Carbonero, la Operación Chupete y llevando el oro, el incienso y la mirra.
Entre los carromatos, animaban la cabalgata 11 compañías escénicas de Burgos, Francia y Portugal, arropadas por colectivos burgaleses y grupos de danzas de la ciudad.
Masiva bienvenida en Burgos a los Queridos Reyes Magos, que tienen por delante una entretenida noche para cumplir los deseos de los burgaleses y llenar los hogares de felicidad.DB
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