El mercado inmobiliario arranca el año con la incertidumbre con la que terminó el anterior en la obra nueva y con la materialización de los proyectos de eficiencia energética que esperaban ayudas y fondos para su puesta en marcha. «El sector está expectante a ver cómo evoluciona el coste de construcción, para ajustar precio que case rentabilidad y demanda», explica el presidente del Colegio de Arquitectos de Burgos, COABU, Javier Achirica. Las cifras reflejan un descenso de la promoción de obra nueva y un ascenso de la rehabilitación de edificios. En nueva construcción se han visado entre enero y marzo un total de 195 inmuebles que suponen un descenso del 43,8% respecto al mismo periodo del año pasado, que ascendieron a 347 inmuebles en construcción. Pero son un 21,8% más que los que se registraban antes de la pandemia. El año 2019 arrancó con 160 proyectos de vivienda nueva. Lo que no termina de despegar es la vivienda protegida. A penas hay promociones al inicio del año. En 2023 y en 2022 el contador de VPO de nueva construcción está a cero. En el primer trimestre de 2019 eran 10.El sector está pendiente de ajustar costes de construcción pero también es cierto que los visados que llegan al colegio son proyectos de ejecución, hay proyectos básicos que se están tramitando y se producen retrasos en licencias pero el sector está expectante en cuanto a costes», explica Achirica. Añade también que «en tramos de tiempo corto el análisis de cifras está muy marcado por las grandes promociones, algunas te pueden hacer crecer o caer en un trimestre»
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