La ola de calor se siente estos días de julio en Burgos y eso ha disparado el número de usuarios de las piscinas municipales de verano de la ciudad. Ayer se registraron temperaturas máximas superando de media los 35 grados una cifra que va en aumento y quien más quien menos se acerca a las instalaciones municipales a darse un chapuzón. Así, el pasado jueves se multiplicó por tres los usuarios de las instalaciones de verano con respecto al inicio de la semana.A falta de datos disgregados por instalaciones el jueves, primer día con avisos en amarillo y ola de calor en la ciudad, se registraron unos 7.000 usuarios en las instalaciones municipales. El pasado lunes se habían alcanzado las 2.687 entradas en los complejos acuáticos.En total las piscinas municipales ya superan las 105.000 entradas desde que se abrieron las áreas de verano el pasado 17 de junio. «El clima, hasta ahora, no ha ayudado mucho», reconoce el concejal de Deportes, César Barriada. Aún con todo se han registrado picos de 7.000 usuarios durante tres jornadas, a la que se añade el pasado jueves. La primera en la que se rebasaron los 7.565 usuarios en las instalaciones acuáticas de la ciudad fue el 25 de junio. Es el día en el que se registró una mayor afluencia. Después no se ha vuelto a superar esa barrera hasta el pasado ocho de julio (7.002) y también el 11 de julio en el que habían entrado 7.281 usuarios. Jornada especialmente baja fue el 29 de junio, día grande de las Fiestas de San Pedro, en el que se registraron 778 bañistas.
EL CORREO DE BURGOS.
Comentarios