Las terrazas de hostelería instaladas en zonas de aparcamiento empiezan a ser historia. El Ayuntamiento de Burgos está ejecutando las órdenes de desmantelamiento a las que se autorizaron durante la pandemia y que cuentan con resolución negativa. En el futuro, será posible que los locales vuelvan a tramitar ante Licencias autorizaciones de carácter temporal, de acuerdo a la normativa vigente, para los meses de mayo a septiembre, pero eso ya será para el próximo 2025.La Policía Local dispone de un listado completo, desde hace pocos días, con las instalaciones que tienen que levantarse, aunque las visitas a los locales con los requerimientos para su retirada comenzaron en el puente de agosto, en algunos casos antes de lo previsto, puesto que los hosteleros esperaban llegar a mediados de septiembre con sus terrazas.Desde el Ayuntamiento de Burgos, se indica que el área de Licencias ha informado a las aproximadamente 70 terrazas que ocupan espacios de aparcamiento de que se les ha acabado el tiempo extraordinario que se habilitó con motivo de la pandemia, desde el verano de 2020, tras levantarse el confinamiento y desde que se permitió consumir fuera de los locales, pero no en sus interiores. Todo aquello parece a septiembre de 2024 parte de un pasado lejano, sin embargo, en la capital burgalesa seguía en vigor esa excepcionalidad. Además, en la orden de desmantelamiento, basada en informes de tráfico negativos a su permanencia, se solicita a los empresarios que dejen la vía pública en perfectas condiciones.La última ordenanza de terrazas ya entró en vigor en mayo de 2023, pero se había establecido como condición que los hosteleros debían presentar sus proyectos de ocupación de vía pública, cuestión para la que se dio varios meses (hasta el pasado mayo). La administración debía estudiarlos y contestarlos uno a uno, y después, en el caso de resolución negativa, responder a las alegaciones presentadas contra la orden de desmantelamiento hasta este septiembre. Todos estos trámites se han alargado en el tiempo hasta ahora y, por tanto, ya se había dado como válido que salvarían el verano, aunque todo se ha precipitado antes del final de la estación estival.El concejal responsable del área de Servicios, José Antonio López, explica que ya se ha actuado en algún establecimiento de la zona sur y está previsto que esta semana que comienza se ejecute el desmantelamiento de varias terrazas de bares en las cercanías de los juzgados, en la calle Federico Olmeda. «Por ejemplo, algún establecimiento de esta calle tiene hasta este lunes, 9 de septiembre, para retirar el mobiliario que ocupa la calzada», precisa.
Los agentes de la Policía Local están apoyando estas labores, dado que son los encargados de hacer cumplir las ordenanzas municipales, en este caso la de terrazas.López indica que está sobre la mesa qué sección municipal se va a encargar de retirar los enseres en el caso de que haya resistencia o negativa por parte de los dueños de bares y cafeterías. En estas semanas, han contado con el apoyo de trabajadores de Vías y Obras y también se ha hablado de la colaboración de Urbaser «pero no está cerrado».
Si es el Ayuntamiento de Burgos el que realiza la retirada subsidiaria de las terrazas, se girará factura a los dueños de los locales y el mobiliario que se elimine será tratado como residuo, según establece la ordenanza municipal.De los 70 establecimientos con terraza en zona de aparcamiento, solo uno ha conseguido autorización para mantener la terraza, es el caso del bar Juez, en la zona de San Pedro de la Fuente. Entre los requisitos que se pedían está el de contar con un informe de Tráfico positivo, en relación con la existencia de aparcamiento suficiente en ese entorno.De todas maneras, López recuerda que es factible que los locales tramiten autorizaciones estacionales para el próximo ejercicio, que los técnicos contestarán.
Por otro lado, las terrazas cubiertas y permanentes que llevan varios años funcionando como las existentes en la plaza del Rey San Fernando, plaza de la Libertad, y Comuneros, que han solicitado autorización para mantenerse abiertas van a contar con dos años para funcionar desde quehan solicitado la continuidad, según informa López «porque con el maremagno que ha habido estos meses en Licencias no se les ha podido contestar». De esta manera, el plazo para su retirada, de acuerdo a la ordenanza de terrazas, se sitúa en el entorno de mayo de 2025, fecha en la que se cumplirían dos años desde la entrada en vigor de la última ordenanza (mayo de 2023).
EL CORREO DE BURGOS
Comentarios