La epidemia de gripe mantiene el comportamiento habitual y la tasa de contagios sigue incrementándose, con más del triple de infecciones confirmadas ahora que al inicio de la campaña. De hecho, según información oficial facilitada ayer, la semana pasada se confirmaron 173 casos de enfermedad por cada 100.000 personas. Los epidemiólogos de la Junta destacan que estas cifras indican que el nivel de intensidad todavía es «bajo», pero debería seguir aumentando, como mínimo, otra semana más. De ahí que en el HUBU se haya preparado ya la planta de aislamiento, la séptima del bloque H y que en Neumología apenas se notara ayer la huelga, según información no oficial.
La afección de la gripe es general, con independencia de la edad, pero la mayoría de las hospitalizaciones se están produciendo en mayores de 75 años. Por esa razón insiste tanto la Consejería de Sanidad en la importancia de la vacuna en estas edades, en las que hay mayor riesgo de complicaciones en caso de contagio. Y avanzada la epidemia, solo se ha alcanzado el objetivo de proteger al 75% de la población en los mayores de 80 años; en el resto, todavía no.
Los interesados todavía pueden hacerlo, pidiendo cita en su centro de salud o, si prefieren no esperar a la fecha que les den, pueden acudir los fines de semana a las urgencias de Atención Primaria (a los Puntos de Atención Continuada, PAC; en la capital, en el Divino Valles) para que se la administren en el acto.
Como ya ocurrió el año pasado, la mayoría de los casos de gripe confirmados los han provocado virus del tipo A, que mutan con más facilidad que los del B y también se consideran más peligrosos. La diferencia con la última epidemia es que ahora ha empezado con mucho adelanto: a primeros de noviembre en lugar de hacerlo a primeros de enero, que solía ser lo habitual hasta la pandemia por coronavirus.
De ahí que la previsión acerca del momento en el que se alcanzará el pico de contagios no se pueda estimar con seguridad, porque la proximidad de las Navidades y de las múltiples reuniones sociales que la caracterizan pueden contribuir a diseminar el virus durante más tiempo y, también, con mayor intensidad.
En la última campaña el pico fue de 219 contagios confirmados por cada 100.000 personas, lo cual equivale a una intensidad media. Está por ver cómo evoluciona la pandemia, pero todos los expertos coinciden en que tener tan cerca las fiestas no ayuda a controlar la dispersión de virus.
Por eso se recomienda el uso de mascarilla a todas las personas que tengan fiebre y/u otros síntomas de gripe, especialmente en espacios cerrados.DB
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