Ni pájaros ni aviones. Tampoco Supermán. Son los drones de la Policía Local de Burgos , tres en activo desde junio de 2021. Uno muy ligero para controlar aglomeraciones, otro con cámara térmica para fines similares por la noche y el de mayor tamaño especialmente diseñado para asistir a la Unidad de Reconstrucción de Accidentes . Pasan desapercibidos mientras sobrevuelan la ciudad y cumplen numerosos cometidos. Algunos se dan por hecho, otros no tanto. Cuenta el oficial de la Unidad de Drones, Juan Pérez , que las intervenciones más «espectaculares» son aquellas relacionadas con las carreras ilegales . Han estado muy de moda, sobre todo en el polígono de Villalonquéjar . Sin embargo, la vigilancia aérea, las identificaciones de los participantes y las pertinentes sanciones conllevaron un evidente efecto persuasivo. Y aunque le consta que este tipo de competiciones han vuelto a «remontar», advierte que la flota aumentará en breve con «drones más nuevos y con mejores ópticas».